Encontrados 434 resultados para: agua viva
Porque ellos no se adelantaron para ofrecerles agua y alimento, cuando ustedes iban por el camino, a la salida de Egipto; y porque Moab contrató a Balaam, hijo de Beor, que era de Petor en Arám Naharaim, a fin de que te maldijera. (Deuteronomio 23, 5)
El extranjero que viva en tu país subirá cada vez más alto, mientras que tú caerás cada vez más bajo. (Deuteronomio 28, 43)
Que viva Rubén y no muera, aunque sus hombres sean pocos". (Deuteronomio 33, 6)
Desde aquel día, Josué los destinó a cortar leña y a sacar agua para la comunidad y para el altar del Señor, en el lugar que el Señor eligiera. Esto es lo que hacen todavía hoy. (Josué 9, 27)
Él le dijo: "Por favor, dame un poco de agua, porque tengo sed". Ella abrió un recipiente donde había leche y le dio de beber. Luego lo volvió a cubrir. (Jueces 4, 19)
¡Escuchen a los arqueros junto a los pozos de agua! Allí se narran los actos de justicia del Señor, las gestas de su dominio en Israel, cuando el pueblo del Señor bajó a las Puertas. (Jueces 5, 11)
Sísara pidió agua, ella le dio leche, le ofreció cuajada en taza de príncipes. (Jueces 5, 25)
Así sucedió: Gedeón se levantó de madrugada, exprimió el vellón para sacarle el rocío y llenó con él una copa de agua. (Jueces 6, 38)
Luego el Señor dijo a Gedeón: "Hay todavía demasiada gente; ordénales que bajen hasta el borde del agua, y allí te los pondré a prueba. Irán contigo solamente los que yo te indique; los otros no te acompañarán". (Jueces 7, 4)
Gedeón hizo que la gente bajara hasta el agua, y el Señor le dijo: "A todos los que beban con la lengua, como lamen los perros, los pondrás de un lado; y a todos los que se arrodillen para beber, los pondrás del otro". (Jueces 7, 5)
Los que lamieron el agua llevándosela a la boca, fueron trescientos; el resto de la tropa, en cambio, se arrodilló para beber. (Jueces 7, 6)
Entonces Dios partió el hueco de la roca que hay en Lejí y brotó el agua. Sansón bebió, se sintió reanimado y revivió. Por eso la fuente, que todavía hoy está en Lejí, recibió el nombre de En Hacoré, que significa "Fuente del que invoca". (Jueces 15, 19)