Encontrados 434 resultados para: agua viva

  • Partieron de Alús y acamparon en Refidím, donde el pueblo no tuvo agua para beber. (Números 33, 14)

  • Cómprenles con dinero el alimento que necesitan para comer, y páguenles también el agua que beban. (Deuteronomio 2, 6)

  • Véndeme las provisiones necesarias para comer, y dame también, a cambio de dinero, agua para beber. Te pido solamente que me dejes pasar, (Deuteronomio 2, 28)

  • y te condujo por ese inmenso y temible desierto, entre serpientes abrasadoras y escorpiones. No olvides al Señor, tu Dios, que en esa tierra sedienta y sin agua, hizo brotar para ti agua de la roca, (Deuteronomio 8, 15)

  • Y ustedes se alegrarán en la presencia del Señor, su Dios, junto con sus hijos y sus hijas, sus esclavos y sus esclavas, y también con el levita que viva en sus ciudades, ya que él no tendrá posesión ni herencia entre ustedes. (Deuteronomio 12, 12)

  • Pero no comerán la sangre, sino que la derramarás en la tierra, como si fuera agua. (Deuteronomio 12, 16)

  • Lo harás en presencia del Señor, tu Dios -en el lugar elegido por él- junto con tu hijo y tu hija, tu esclavo y tu esclava, y con el levita que viva en tu ciudad. Y en la presencia del Señor, tu Dios, te alegrarás por todos los beneficios que hayas obtenido de tu trabajo. (Deuteronomio 12, 18)

  • Por eso, derramarás la sangre en la tierra, como si fuera agua. (Deuteronomio 12, 24)

  • De entre los animales que viven en el agua, les estará permitido comer todos aquellos que tengan aletas y escamas. (Deuteronomio 14, 9)

  • Sólo te abstendrás de comer la sangre: la derramarás en la tierra como si fuera agua. (Deuteronomio 15, 23)

  • Te alegrarás en la presencia del Señor, tu Dios -en el lugar que él elija para constituirlo morada de su Nombre- junto con tu hijo y tu hija, con tu esclavo y tu esclava, con el levita que viva en tu ciudad, y con el extranjero, el huérfano y la viuda que estén contigo. (Deuteronomio 16, 11)

  • la llevarán hasta un arroyo de agua perenne, a un lugar donde no se cultiva ni se siembra, y la desnucarán junto al arroyo. (Deuteronomio 21, 4)


“Deus sempre nos dá o que é melhor para nós.” São Padre Pio de Pietrelcina