Encontrados 85 resultados para: Eliseo

  • El rey de Israel, al verlos, dijo a Eliseo: "¿Tengo que matarlos, padre mío?". (II Reyes 6, 21)

  • El rey dijo: "Que Dios me castigue si Eliseo, hijo de Safat, queda hoy con la cabeza sobre el cuello". (II Reyes 6, 31)

  • Eliseo estaba sentado en su casa, y los ancianos estaban sentados con él. El rey le envió a uno de sus hombres; pero antes que llegara el mensajero, Eliseo dijo a los ancianos: "¿Han visto que este hijo de asesino envía a un hombre a cortarme la cabeza? Estén atentos, y cuando llegue el mensajero, empújenlo con la puerta y atránquenla bien. ¿Acaso no se oyen los pasos de su señor que viene detrás de él?". (II Reyes 6, 32)

  • Eliseo dijo entonces: "Escuchen la palabra del Señor: Así habla el Señor: Mañana, a esta misma hora, se venderá un balde de harina de la mejor calidad por un siclo, y dos baldes de cebada por el mismo precio, en la Puerta de Samaría". (II Reyes 7, 1)

  • El escudero en cuyo brazo se apoyaba el rey tomó la palabra y dijo al hombre de Dios: "Aunque el Señor abriera ventanas en el cielo, ¿podría suceder una cosa así?". Eliseo replicó: "Verás esto con tus propios ojos, pero no lo comerás". (II Reyes 7, 2)

  • el escudero había replicado al hombre de Dios: "Aunque el Señor abriera ventanas en el cielo, ¿podría suceder una cosa así?". Y Eliseo había dicho: "Verás esto con tus propios ojos, pero no lo comerás". (II Reyes 7, 19)

  • Eliseo dijo a la madre del niño que él había hecho revivir: "Parte ahora mismo con toda tu familia, y emigra adonde puedas, porque el Señor ha llamado al hambre, y ya viene al país por siete años". (II Reyes 8, 1)

  • El rey estaba hablando con Guejazí, el servidor del hombre de Dios: "Cuéntame, le decía, las maravillas que ha hecho Eliseo". (II Reyes 8, 4)

  • Y mientras le estaba contando al rey cómo Eliseo había hecho revivir a un muerto, la madre del niño que él había hecho revivir vino a reclamar al rey su casa y su campo. Guejazí dijo entonces: "¡Rey, señor mío, esta es la mujer y aquí está el hijo que Eliseo hizo revivir!". (II Reyes 8, 5)

  • Eliseo se dirigió a Damasco. Ben Hadad, rey de Arám, estaba enfermo. Cuando le avisaron: "El hombre de Dios ha venido hasta aquí", (II Reyes 8, 7)

  • Jazael fue al encuentro de Eliseo llevando como presente cuarenta camellos cargados con lo mejor que había en Damasco. Al llegar, se presentó ante él y le dijo: "Tu hijo Ben Hadad, rey de Arám, me ha enviado a preguntarte: ¿Me restableceré de esta enfermedad?". (II Reyes 8, 9)

  • Eliseo respondió: "Ve a decirle: ‘Sí, te restablecerás’; pero el Señor me ha hecho ver que morirá". (II Reyes 8, 10)


“Todas as graças que pedimos no nome de Jesus são concedidas pelo Pai eterno.” São Padre Pio de Pietrelcina