Encontrados 1253 resultados para: Dan

  • Lot dirigió una mirada a su alrededor, y vio que toda la región baja del Jordán, hasta llegar a Soar, estaba tan bien regada como el Jardín del Señor o como la tierra de Egipto. Esto era antes que el Señor destruyera a Sodoma y Gomorra. (Génesis 13, 10)

  • Entonces Lot eligió para sí toda la región baja del Jordán y se dirigió hacia el este. Así se separaron el uno del otro: (Génesis 13, 11)

  • Al enterarse de que su pariente Lot había sido llevado cautivo, Abrám reclutó a la gente que estaba a su servicio -trescientos dieciocho hombres nacidos en su casa- y persiguió a los invasores hasta Dan. (Génesis 14, 14)

  • Y el Ángel le dijo: "No pongas tu mano sobre el muchacho ni le hagas ningún daño. Ahora sé que temes a Dios, porque no me has negado ni siquiera a tu hijo único". (Génesis 22, 12)

  • "Aunque yo no soy más que un extranjero residente entre ustedes, cédanme en propiedad alguno de sus sepulcros, para que pueda retirar el cadáver de mi esposa y darle sepultura". (Génesis 23, 4)

  • Y añadió: "En nuestra casa hay paja y forraje en abundancia, y también hay sitio para pasar la noche". (Génesis 24, 25)

  • El Señor colmó de bendiciones a mi patrón y lo hizo prosperar, dándole ovejas y vacas, plata y oro, esclavos y esclavas, camellos y asnos. (Génesis 24, 35)

  • y esta le dio varios hijos: Zimrán, Iocsán, Medán, Madián, Isbac y Súaj. (Génesis 25, 2)

  • Iocsán fue padre de Sebá y Dedán. Los descendientes de Dedán fueron los asuritas, los letusíes y los leumíes. (Génesis 25, 3)

  • el cual, a los cuarenta años, se casó con Rebeca, hija de Betuel, el arameo de Padán Arám, y hermana de Labán, el arameo. (Génesis 25, 20)

  • tú no nos harás ningún daño, porque nosotros no te hemos causado ninguna molestia, sino que siempre fuimos amables contigo y te dejamos partir en paz. Tú eres ahora bendecido por el Señor". (Génesis 26, 29)

  • Ve al corral y tráeme de allí dos cabritos bien cebados. Yo prepararé con ellos una buena comida para tu padre, de esas que le agradan a él, (Génesis 27, 9)


“A sua função é tirar e transportar as pedras, e arrancar os espinhos. Jesus é quem semeia, planta, cultiva e rega. Mas seu trabalho também é obra de Jesus. Sem Ele você nada pode fazer.” São Padre Pio de Pietrelcina