Encontrados 701 resultados para: sino

  • El Padre que invocan no hace diferencias entre personas, sino que juzga a cada uno según sus obras; tomen, pues, en serio estos años en que viven fuera de la patria. (1º Carta de Pedro 1, 17)

  • sino con la sangre preciosa de Cristo, el Cordero sin mancha ni defecto. (1º Carta de Pedro 1, 19)

  • Dios pensaba en él desde antes de la creación del mundo, pero no fue revelado sino a ustedes, al final de los tiempos. (1º Carta de Pedro 1, 20)

  • ya que han nacido esta vez, no de semilla corruptible, sino de la palabra incorruptible del Dios que vive y permanece. (1º Carta de Pedro 1, 23)

  • Que los sirvientes obedezcan a sus patrones con todo respeto, no sólo a los que son buenos y comprensivos, sino también a los que son duros. (1º Carta de Pedro 2, 18)

  • Insultado, no devolvía los insultos, y maltratado, no amenazaba, sino que se encomendaba a Dios que juzga justamente. (1º Carta de Pedro 2, 23)

  • sino que más bien irradie de lo íntimo del corazón la belleza que no se pierde, es decir, un espíritu suave y tranquilo. Eso sí que es muy precioso ante Dios. (1º Carta de Pedro 3, 4)

  • sino bendigan en sus corazones al Señor, a Cristo; estén siempre dispuestos para dar una respuesta a quien les pida cuenta de su esperanza, (1º Carta de Pedro 3, 15)

  • Ustedes reconocen en esto la figura del bautismo que ahora los salva; no esperaban de él una limpieza corporal, sino que pidieron a Dios una renovación interior por medio de la resurrección de Cristo Jesús. (1º Carta de Pedro 3, 21)

  • Por lo cual, entreguen lo que les queda de esta vida, no ya a las pasiones humanas, sino a la voluntad de Dios. (1º Carta de Pedro 4, 2)

  • pero si sufre por ser cristiano, no tiene por qué avergonzarse, sino que más bien debe dar gracias a Dios por llevar ese nombre. (1º Carta de Pedro 4, 16)

  • Apacienten el rebaño de Dios, cada cual en su lugar; cuídenlo no de mala gana, sino con gusto, a la manera de Dios; no piensen en ganancias, sino háganlo con entrega generosa; (1º Carta de Pedro 5, 2)


“Mantenha-se sempre muito unido à Igreja Católica, pois somente ela pode lhe dar a verdadeira paz, porque somente ela possui Jesus Sacramentado que é o verdadeiro príncipe da paz.” São Padre Pio de Pietrelcina