Encontrados 42 resultados para: perder

  • El granizo dañó todo cuanto había en el campo, en todo el país de Egipto, desde los hombres hasta los animales; el granizo echó a perder todas las verduras del campo y aún quebró todos los árboles del campo. (Exodo 9, 25)

  • Jonatán respondió: «Mi padre lo ha echado a perder todo con ese juramento. Ustedes ven cómo mis ojos recobran el brillo por haber probado ese poco de miel. (1 Samuel 14, 29)

  • Joab le respondió: «No tengo tiempo que perder contigo.»Y yendo al árbol de donde colgaba Absalón, le clavó personalmente tres dardos en el corazón, cuando aún estaba vivo. (2 Samuel 18, 14)

  • Josías, de los hijos de Merarí, tuvo como hijos a Simrí, que hizo de primero porque, después de perder a su primogénito, su padre lo puso al frente, (1 Crónicas 26, 10)

  • Al esconderme en el santuario habría cometido un delito, y esto habría dado motivo para perder mi reputación y avergonzarme. (Nehemías 6, 13)

  • y que jamás manché mi nombre ni el de mi padre en este país de destierro. Soy hija única de mi padre. El no tiene ni hijos que puedan heredar de él, ni pariente próximo a quien darme por esposo; no tengo, pues, para quién vivir. Después de perder siete maridos, ¿para qué quiero la vida? Si no quieres darme la muerte, Señor, apiádate de mí, ordena que me respeten y tengan compasión de mí. Que no escuche más insultos.» (Tobías 3, 15)

  • «¿Por qué has dejado partir a mi hijo? ¿No era él el bastón para nuestras manos, el que iba y venía con nosotros? ¿Por qué ha de ser el dinero lo primero de todo? Es mejor perder todo y salvar a nuestro hijo. (Tobías 5, 19)

  • Mardoqueo lo puso al tanto de lo que ocurría y le habló, en especial, de la cantidad de dinero que Amán había ofrecido al tesoro real para compensar lo que se iba a perder con los judíos. (Ester 4, 7)

  • Dios me ha hecho perder el valor y el Omnipotente me ha espantado (Job 23, 16)

  • Echó a perder sus viñas con granizo y sus sicomoros con la helada. (Salmos 78, 47)

  • Les habló muchas cosas parecidas exhortándolos a no perder nunca el amor a la Ley. (2 Macabeos 2, 3)

  • Escupió el pedazo de carne con valentía, como lo deben hacer los que no desean hacer cosas prohibidas, aun a riesgo de perder la vida. (2 Macabeos 6, 20)


“Dirás tu o mais belo dos credos quando houver noite em redor de ti, na hora do sacrifício, na dor, no supremo esforço duma vontade inquebrantável para o bem. Este credo é como um relâmpago que rasga a escuridão de teu espírito e no seu brilho te eleva a Deus”. São Padre Pio de Pietrelcina