Encontrados 343 resultados para: otra

  • Si sus padres o hermanos vienen a querellarse contra ustedes, les diremos: «Sean comprensivos con ellos; miren que la guerra no nos dejó la oportunidad de dar una mujer a cada uno de ellos. No son ustedes los que se las dieron; de otra manera habrían quebrantado su voto.» (Jueces 21, 22)

  • Ambos tomaron por esposas a mujeres moabitas: una se llamaba Orfa y la otra Rut. (Rut 1, 4)

  • Booz, dirigiéndose entonces a Rut, le dijo: «Oye, hijita, no vayas a recoger espigas a otra parte. (Rut 2, 8)

  • Noemí le respondió: «Muy bien, hija mía, quédate con sus trabajadores, pues así no tendrás que pasar malos ratos si vas a otra parte.» (Rut 2, 22)

  • Tenía dos mujeres: una se llamaba Ana y la otra Penena. Penena tenía hijos, pero Ana no tenía. (1 Samuel 1, 2)

  • Y esto ocurría todos los años cada vez que subía a la Casa de Yavé; la otra la molestaba y ella se ponía a llorar y no quería comer. (1 Samuel 1, 7)

  • Volvió a llamar Yavé: «Samuel.» Se levantó Samuel y se fue donde Helí diciendo: «Aquí estoy, pues me has llamado.» Otra vez Helí contestó: «No te he llamado; hijo mío, anda a acostarte.» (1 Samuel 3, 6)

  • Pero al amanecer del día siguiente encontraron otra vez a Dagón en el suelo delante del Arca de Yavé; su cabeza y sus manos estaban rotas en el umbral de la puerta, solamente el tronco de Dagón había quedado donde cayó. (1 Samuel 5, 4)

  • En el paso por donde aquél tenía que atravesar para llegar al campamento filisteo hay dos rocas sobresalientes a uno y otro lado; una se llama Boses y la otra Sené. (1 Samuel 14, 4)

  • Así, pues, sin otra arma que su honda y una piedra, David derrotó al filisteo y le quitó la vida. (1 Samuel 17, 51)

  • Micol, la otra hija de Saúl, se enamoró de David; se lo dijeron a Saúl y le agradó mucho la noticia. (1 Samuel 18, 20)

  • Pasado mañana se notará más. No dejes de ir al lugar donde te escondiste la otra vez y colócate al lado de la piedra que indica el camino. (1 Samuel 20, 19)


“Que Nossa Senhora nos obtenha o amor à cruz, aos sofrimentos e às dores.” São Padre Pio de Pietrelcina