Encontrados 45 resultados para: orillas

  • Galaad se quedó al otro lado del Jordán y, ¿por qué se quedó Dan en sus naves? Aser se ha quedado a orillas del mar, tranquilo está en sus puertos. (Jueces 5, 17)

  • Salomón mandó también construir una flota en Asiongaber, que está cerca de Elat, a orillas del mar Rojo, en la tierra de Edom. (1 Reyes 9, 26)

  • Obedeció, pues, las palabras de Yavé y se fue a vivir a orillas del torrente de Kerit, al oriente del Jordán; (1 Reyes 17, 5)

  • Cincuenta hermanos profetas de Jericó los acompañaron a cierta distancia. Mientras tanto, Elías y Eliseo se detenían a orillas del Jordán. (2 Reyes 2, 7)

  • En el noveno año de Oseas, el rey de Asiria tomó Samaria, desterró a los israelitas a Asur y los estableció en Jalaj, a orillas del Jabor, río de Gozán, y en las ciudades de los medos. (2 Reyes 17, 6)

  • Entonces Salomón fue a Asiongaber y a Elat a orillas del mar, en el país de Edom. (2 Crónicas 8, 17)

  • Allí, a orillas del río Ahavá, ordené un ayuno para humillarnos ante nuestro Dios, a fin de implorar de él un feliz viaje para nosotros, nuestros hijos y nuestras pertenencias. (Esdras 8, 21)

  • Las plantas que están a orillas del Nilo como los juncos y las cañas se marchitarán, todos los sembrados regados por el Nilo se pondrán amarillos, se secarán y no quedará nada. (Isaías 19, 7)

  • Felices ustedes, que sembrarán entonces a orillas de todos los esteros o soltarán sin problemas su buey o su burro. (Isaías 32, 20)

  • Crecerán como hierba regada, como sauces a orillas de los ríos. (Isaías 44, 4)

  • Ni el más ágil podrá escapar, ni el más valiente, salvarse, Al norte, a orillas del río Eufrates, tropezaron y cayeron. (Jeremías 46, 6)

  • Ese día será para el Señor Yavé un día de venganza, para vengarse de sus enemigos: Su espada los va a devorar hasta quedar satisfecha, y se embriagará con su sangre. Sí, el Señor, Yavé de los Ejércitos, celebra un sacrificio de centenares de víctimas, en el norte, a orillas del río Eufrates. (Jeremías 46, 10)


“Os talentos de que fala o Evangelho são os cinco sentidos, a inteligência e a vontade. Quem tem mais talentos, tem maior dever de usá-los para o bem dos outros.” São Padre Pio de Pietrelcina