Encontrados 564 resultados para: estás

  • Y añade: Si tu enemigo tiene hambre, dale de comer; si tiene sed, dale de beber: éstas serán otras tantas brasas sobre su cabeza. (Carta a los Romanos 12, 20)

  • Pues los mandamientos: no cometas adulterio, no mates, no robes, no tengas envidia. y todos los demás, se resumen en estas palabras: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. (Carta a los Romanos 13, 9)

  • A su vez Isaías dice: Cual renuevo en una raíz surgirá un descendiente de Jesé y se levantará para guiar las naciones. En él pondrán éstas su esperanza. (Carta a los Romanos 15, 12)

  • Con estas comparaciones, hermanos, me refería a Apolo y a mí. Aprendan a no valerse de uno a costa del otro para engreirse. (1º Carta a los Corintios 4, 6)

  • ¿Estás segura tú, mujer, de que vas a salvar a tu esposo? ¿Y tú, marido, estás seguro de que podrás salvar a tu esposa? (1º Carta a los Corintios 7, 16)

  • Ahora, pues, son válidas la fe, la esperanza y el amor; las tres, pero la mayor de estas tres es el amor. (1º Carta a los Corintios 13, 13)

  • Han tranquilizado mi espíritu y el de ustedes; sepan apreciar siempre a personas como éstas. (1º Carta a los Corintios 16, 18)

  • Estas pruebas nuestras son para consuelo y salvación de ustedes, y de igual modo nuestro consuelo será consuelo para ustedes cuando tengan que soportar los mismos sufrimientos que ahora padecemos nosotros. (2º Carta a los Corintios 1, 6)

  • Yo sé que puedo contar con ustedes, y estoy realmente orgulloso de ustedes; esto me conforta y me llena de alegría en todas estas amarguras. (2º Carta a los Corintios 7, 4)

  • Así lo dispusimos, para que nadie tenga sospechas respecto a estas sumas importantes que estamos manejando. (2º Carta a los Corintios 8, 20)

  • Además de estas y otras cosas, pesa sobre mí la preocupación por todas las Iglesias. (2º Carta a los Corintios 11, 28)

  • y la Ley no da lugar a la fe cuando dice: El que cumple estas cosas tendrá vida por medio de ellas. (Carta a los Gálatas 3, 12)


“Recorramos a Jesus e não às pessoas, pois só ele nunca nos faltará.” São Padre Pio de Pietrelcina