Encontrados 31 resultados para: consejeros
Se portó mal con Yavé, como los de la familia de Ajab, porque después de la muerte de su padre, fueron ellos sus consejeros para su perdición. (2 Crónicas 22, 4)
Se ganaron con dinero a algunos consejeros de la corte, para hacer fracasar el proyecto, y lo detuvieron durante todo el tiempo de Ciro, rey de Persia, hasta el reinado de Darío, rey de Persia. (Esdras 4, 5)
juntamente con Setar-Boznai y sus consejeros, los persas de la otra orilla del río. «Al rey Darío, paz. (Esdras 5, 7)
Por tanto, les digo a ustedes, Tatnaí, gobernador de la provincia del otro lado del río, Setar-Boznai y los consejeros persas que viven al otro lado del río, (Esdras 6, 6)
Tatnaí, gobernador de la parte de acá del río, Setar-Boznaí y sus consejeros actuaron conforme a la orden del rey Darío; (Esdras 6, 13)
Lo que es tú, irás como delegado del rey y de sus siete consejeros para cuidar de que se observe en Judá y Jerusalén la Ley de Dios que está en tus manos, (Esdras 7, 14)
y para llevar allá el oro y la plata que el rey y sus consejeros han ofrecido generosamente al Dios de Israel, cuya Casa está en Jerusalén; (Esdras 7, 15)
y que me hizo objeto de la simpatía del rey, de sus consejeros y de todos sus jefes principales. Por mi parte, cobré ánimo, ya que la mano de mi Dios estaba conmigo, y reuní a los jefes de Israel para que partieran junto a mí. (Esdras 7, 28)
pesé delante de ellos la plata, el oro y las copas consagradas donadas por el rey, sus consejeros y sus jefes, y por todos los israelitas que habíamos podido hallar, para la Casa de nuestro Dios. (Esdras 8, 25)
Luego regresé a la casa. Los consejeros no supieron dónde había ido ni lo que había hecho. Hasta este momento no les había dicho nada a los judíos, ni a los consejeros, ni a los sacerdotes, ni a los notables, ni a ninguno de los que tenían un cargo público. (Nehemías 2, 16)
Tenían miedo, pero me levanté y dije a los notables, a los consejeros y al resto del pueblo: «Acuérdense del Señor, grande y formidable, y peleen por sus hermanos, hijos e hijas, por sus mujeres y sus casas.» (Nehemías 4, 8)
Les dije a los notables, a los consejeros y al resto del pueblo: «Los trabajos tienen mucha extensión y nosotros estamos repartidos a lo largo de la muralla, lejos uno de otro, (Nehemías 4, 13)