Encontrados 346 resultados para: cabeza

  • Entonces he desencadenado mi cólera contra ellos, los he exterminado con el fuego de mi furor y he hecho que recaiga sobre su cabeza su mal comportamiento, palabra de Yavé." (Ezequiel 22, 31)

  • Suspira en silencio y no guardes luto como se hace por los muertos; quédate con tu turbante en la cabeza y con tus sandalias en los pies, no tapes tu barba ni comas el pan que te traigan tus vecinos." (Ezequiel 24, 17)

  • seguirán con sus turbantes en la cabeza y sus sandalias en los pies, no gemirán ni llorarán. Se sentirán débiles a causa de sus maldades y se lamentarán entre ustedes. (Ezequiel 24, 23)

  • Por ti se rapan la cabeza y se visten de sacos; muy afligidos, dejarán oír sus lamentos, una amarga lamentación. (Ezequiel 27, 31)

  • Pondré a la cabeza de ellas a un pastor único para que se preocupe de ellas, a mi servidor David. El será su pastor. (Ezequiel 34, 23)

  • Esto dice Yavé: Ese día, te vendrán ideas al espíritu y tendrás en la cabeza malas intenciones. (Ezequiel 38, 10)

  • Tendrán turbantes de lino en la cabeza y calzoncillos de lino en las entrepiernas, no se pondrán nada que los haga traspirar. (Ezequiel 44, 18)

  • No se raparán la cabeza, no tendán el cabello largo, sino que se lo cortarán como corresponde. (Ezequiel 44, 20)

  • La cabeza de esta estatua era de oro puro, el pecho y los brazos de plata, las caderas y el vientre de bronce, (Daniel 2, 32)

  • A ti, ¡oh, rey!, el más poderoso entre todos los reyes, Dios te ha dado el reino, el imperio, el poder y la gloria. Los hombres, los animales y los pájaros, dondequiera que habiten, los ha puesto Dios bajo tu mano. Dios te ha hecho su soberano y, por eso, la cabeza de oro eres tú. (Daniel 2, 38)

  • También quise saber lo de los diez cuernos que tenía en la cabeza, y del otro cuerno que le había salido y de los tres primeros que se le cayeron; y de este cuerno con ojos y boca que hablaba con soberbia y que parecía mayor que los otros (Daniel 7, 20)

  • Cuando me dijo esas palabras, agaché mi cabeza y quedé en silencio; (Daniel 10, 15)


“O amor nada mais é do que o brilho de Deus nos homens”. São Padre Pio de Pietrelcina