Encontrados 76 resultados para: buenos

  • Un canasto tenía higos muy buenos, como son los primeros que maduran; el otro tenía higos podridos, tan malos que no se podían comer. (Jeremías 24, 2)

  • Y me preguntó Yavé: «¿Qué ves, Jeremías?» Le contesté: «Higos. Los buenos son muy buenos; los malos están tan podridos que no se pueden comer.» (Jeremías 24, 3)

  • Así como se mira con gusto estos higos buenos, así me voy a interesar por el bien de los desterrados de Judá, que eché de este lugar al país de los caldeos. (Jeremías 24, 5)

  • Todas tus mujeres que han quedado en el palacio del rey de Judá son llevadas a los generales del rey de Babilonia, y se burlan de ti con esta canción: «Te han engañado tus buenos amigos; al hundirse tus pies en el fango, ellos te abandonaron.» (Jeremías 38, 22)

  • ¿Cómo pueden decir ustedes: «Somos valientes y buenos para la pelea»? (Jeremías 48, 14)

  • Si alguien es sabio,que comprenda estas palabras,y si es inteligente, que las entienda.Pues los caminos del Señor son derechosy por ellos caminan los buenos,mientras que los malos en ellos tropiezan. (Oseas 14, 10)

  • Por eso la Ley está sin fuerza y no se hace justicia. Como los malvados mandan a los buenos, no se ve más que derecho torcido. (Habacuc 1, 4)

  • para que así sean hijos de su Padre que está en los Cielos. Porque él hace brillar su sol sobre malos y buenos, y envía la lluvia sobre justos y pecadores. (Evangelio según San Mateo 5, 45)

  • Lo mismo pasa con un árbol sano: da frutos buenos, mientras que el árbol malo produce frutos malos. (Evangelio según San Mateo 7, 17)

  • Un árbol bueno no puede dar frutos malos, como tampoco un árbol malo puede producir frutos buenos. (Evangelio según San Mateo 7, 18)

  • Todo árbol que no da buenos frutos se corta y se echa al fuego. (Evangelio según San Mateo 7, 19)

  • Cuando está llena, los pescadores la sacan a la orilla, se sientan, escogen los peces buenos y los echan en canastos, y tiran los que no sirven. (Evangelio según San Mateo 13, 48)


“O temor e a confiança devem dar as mãos e proceder como irmãos. Se nos damos conta de que temos muito temor devemos recorrer à confiança. Se confiamos excessivamente devemos ter um pouco de temor”. São Padre Pio de Pietrelcina