Encontrados 193 resultados para: aquéllos

  • Por eso levanto mi mano para que las saqueen aquellos que fueron sus esclavos.» Así sabrán que Yavé de los Ejércitos me ha enviado. (Zacarías 2, 13)

  • Así hablaban entre sí los que respetan a Yavé. Yavé, que estaba escuchando, lo supo, y mandó en seguida que en un libro se anotaran los nombres de aquellos que lo respetaban y reverenciaban su Nombre. (Malaquías 3, 16)

  • Grande fue el asombro; aquellos hombres decían: «¿Quién es éste, que hasta los vientos y el mar le obedecen?» (Evangelio según San Mateo 8, 27)

  • Nadie conoce al Hijo sino el Padre, y nadie conoce al Padre sino el Hijo y aquellos a quienes el Hijo se lo quiera dar a conocer. (Evangelio según San Mateo 11, 27)

  • Jesús les contestó: «No todos pueden captar lo que acaban de decir, sino aquellos que han recibido este don. (Evangelio según San Mateo 19, 11)

  • Cuando llegó el tiempo de la vendimia, el dueño mandó a sus sirvientes que fueran donde aquellos labradores y cobraran su parte de la cosecha. (Evangelio según San Mateo 21, 34)

  • El rey se enojó y envió a sus tropas, que dieron muerte a aquellos asesinos e incendiaron su ciudad. (Evangelio según San Mateo 22, 7)

  • En aquellos días Jesús vino de Nazaret, pueblo de Galilea, y se hizo bautizar por Juan en el río Jordán. (Evangelio según San Marcos 1, 9)

  • Los que están a lo largo del camino cuando se siembra, son aquellos que escuchan la Palabra, pero en cuanto la reciben, viene Satanás y se lleva la palabra sembrada en ellos. (Evangelio según San Marcos 4, 15)

  • En aquellos días se juntó otra vez muchísima gente, y no tenían nada que comer. Jesús llamó a sus discípulos y les dijo: (Evangelio según San Marcos 8, 1)

  • ¡Pobres de las mujeres que estén embarazadas o estén criando en aquellos días! (Evangelio según San Marcos 13, 17)

  • Porque en aquellos días habrá tal angustia como no hubo otra igual desde el principio de la creación hasta los días presentes, ni la habrá en el futuro. (Evangelio según San Marcos 13, 19)


“Que Jesus o mergulhe no esplendor da Sua imortal juventude.” São Padre Pio de Pietrelcina