Encontrados 89 resultados para: Mensaje

  • Cuando pasaba la puerta, Ajías oyó sus pasos y le dijo: «Entra, esposa de Jeroboam, ¿por qué quieres pasar por otra? Tengo un duro mensaje para ti. (1 Reyes 14, 6)

  • Pero el rey de Israel contestó:«¡Palabras! No se canta victoria antes de la batalla.» Este mensaje llegó a Ben-Hadad cuando estaba bebiendo con los príncipes en su tienda de campaña. (1 Reyes 20, 11)

  • Cuando salieron los jóvenes de los jefes de provincias que formaban la vanguardia, alguien envió este mensaje a Ben-Hadad: «Están saliendo de Samaria algunas tropas.» (1 Reyes 20, 17)

  • «Oigan el mensaje del gran rey de Asur. Así habla el rey: No se dejen engañar por Ezequías, porque no los podrá salvar, (2 Reyes 18, 29)

  • Luego dijo a toda la asamblea de Israel: «Si les parece bien y la cosa conviene a Yavé, nuestro Dios, vamos a mandar un mensaje a nuestros hermanos que han quedado en todas las regiones de Israel y, además, a los sacerdotes y levitas en sus ciudades y aldeas, para que se reúnan con nosotros; (1 Crónicas 13, 2)

  • Pero los habitantes de todas estas regiones despreciaron el mensaje de Nabucodonosor y no quisieron ir con él a la guerra, ya que no lo temían, sino que lo consideraban como un hombre cualquiera. Por tanto, despidieron a los mensajeros con las manos vacías y avergonzados. (Judit 1, 11)

  • Un día al siguiente le pasa el mensaje y una noche a la otra se lo hace saber. (Salmos 19, 3)

  • mas por todo el orbe se capta su ritmo, y el mensaje llega hasta el fin del mundo. (Salmos 19, 5)

  • Si a la tierra envía su mensaje, su palabra corre rápidamente; (Salmos 147, 15)

  • Judas les envió un mensaje en son de paz, diciéndoles: «Permítannos atravesar su país para llegar al nuestro; nadie de nosotros les hará mal alguno, pues se trata solamente de seguir nuestro camino.» Pero no quisieron abrirle las puertas. (1 Macabeos 5, 48)

  • Alejandro entonces mandó mensajeros a Tolomeo, rey de Egipto, con el siguiente mensaje: (1 Macabeos 10, 51)

  • Cuando Jonatán tuvo conocimiento del mensaje de Apolonio, se impresionó mucho. Salió de Jerusalén con diez mil hombres escogidos, y su hermano Simón vino a ayudarlo. (1 Macabeos 10, 74)


“Não desperdice suas energias em coisas que geram preocupação, perturbação e ansiedade. Uma coisa somente é necessária: elevar o espírito e amar a Deus.” São Padre Pio de Pietrelcina