Encontrados 44 resultados para: Llamas

  • El agua apaga las llamas de la hoguera; la limosna borra los pecados. (Sirácides (Eclesiástico) 3, 30)

  • No excites al pecador: podrías quemarte en sus llamas. (Sirácides (Eclesiástico) 8, 10)

  • El partido de los pecadores no es más que un montón de leña seca: todos acabarán en llamas y fuego. (Sirácides (Eclesiástico) 21, 9)

  • Humo y vapor se ven antes que las llamas: las injurias preceden a la sangre derramada. (Sirácides (Eclesiástico) 22, 24)

  • El Señor lo vio y eso no le gustó; fueron exterminados por el ardor de su cólera. Los castigó de manera extraordinaria: llamas ardientes los devoraron. (Sirácides (Eclesiástico) 45, 19)

  • de las llamas sofocantes que me rodeabanyy no me quemé en medio del fuego (Sirácides (Eclesiástico) 51, 4)

  • Así como las llamas queman el rastrojo y como el pasto seco se consume en el fuego, así se pudrirá su raíz y el viento se llevará su flor junto con el polvo. Pues han rechazado la ley de Yavé Sabaot y han despreciado la palabra del Santo de Israel. (Isaías 5, 24)

  • El enojo de Yavé de los Ejércitos ha sacudido el país y el pueblo ha sido pasto de las llamas. Nadie se compadece de su hermano, cada uno se come la carne de su vecino. (Isaías 9, 20)

  • En Sión, los pecadores se han espantado y los impíos han sido presa del pánico: «¿Quién de nosotros podrá resistir ese fuego devorador, quién convivirá con llamas que nunca se apagan? (Isaías 33, 14)

  • Si atraviesas el río, yo estaré contigo y no te arrastrará la corriente. Si pasas por medio de las llamas, no te quemarás, ni siquiera te chamuscarás. (Isaías 43, 2)

  • Echa la mitad al fuego, pone a asar la carne sobre las brasas, y cuando está listo, se come el asado hasta quedar satisfecho. Al mismo tiempo, se calienta y dice: «Me caliento mientras miro las llamas.» (Isaías 44, 16)

  • Serán todos como paja que devora el fuego, ninguno de ellos podrá salvarse de las llamas. -y no serán brasas para el pan, o brasero para calentarse. (Isaías 47, 14)


“Mesmo a menor transgressão às leis de Deus será levada em conta.” São Padre Pio de Pietrelcina