Encontrados 4435 resultados para: Les

  • Isaac les dio un banquete, y comieron y bebieron. (Génesis 26, 30)

  • Con las pieles de los cabritos le cubrió las manos y la parte lampiña del cuello, (Génesis 27, 16)

  • Entonces Isaac le respondió: «Mira, vivirás lejos de las tierras fértiles y lejos del rocío del cielo. (Génesis 27, 39)

  • Mientras dormía, tuvo un sueño. Vio una escalera que estaba apoyada en la tierra, y que tocaba el cielo con la otra punta, y por ella subían y bajaban ángeles de Dios. (Génesis 28, 12)

  • Les preguntó Jacob: «¿Conocen a Labán, el hijo de Najor.» Contestaron: «Sí, lo conocemos.» (Génesis 29, 5)

  • Jacob les dijo: «Veo que el sol está todavía alto y que aún no es hora para guardar el ganado, ¿por qué no dan agua a sus ovejas y las llevan a pastar.» (Génesis 29, 7)

  • Pero si las ovejas eran débiles, no ponía las varas. Así las débiles quedaban para Labán, y las robustas eran para Jacob. (Génesis 30, 42)

  • y les dijo: «Veo que el padre de ustedes no me mira con buenos ojos como antes, pero el Dios de mi padre ha estado conmigo. (Génesis 31, 5)

  • Los animales destrozados por las fieras, no te los traía, sino que yo mismo los reemplazaba, y tú me exigías lo que había sido robado de noche o de día. (Génesis 31, 39)

  • Jacob, por su parte, siguió su camino y le salieron al encuentro Angeles de Dios. (Génesis 32, 2)

  • Jacob dio las mismas instrucciones al segundo, al tercero y a todos los demás que guiaban los rebaños. Y les dijo: (Génesis 32, 20)

  • Hamor habló con ellos y les dijo: «Siquem, mi hijo, está enamorado de la hermana de ustedes. Les ruego que se la den por esposa. (Génesis 34, 8)


“Não queremos aceitar o fato de que o sofrimento é necessário para nossa alma e de que a cruz deve ser o nosso pão cotidiano. Assim como o corpo precisa ser nutrido, também a alma precisa da cruz, dia a dia, para purificá-la e desapegá-la das coisas terrenas. Não queremos entender que Deus não quer e não pode salvar-nos nem santificar-nos sem a cruz. Quanto mais Ele chama uma alma a Si, mais a santifica por meio da cruz.” São Padre Pio de Pietrelcina