Encontrados 231 resultados para: Ángel

  • Y tocó el quinto ángel. Vi entonces una estrella que había caído del cielo a la tierra. Le fue entregada la llave del pozo del abismo. (Apocalipsis 9, 1)

  • Tienen un rey, el ángel del Abismo, que en hebreo se llama Abadón, y en griego, Apolión (en castellano, Destrucción). (Apocalipsis 9, 11)

  • Tocó el sexto ángel su trompeta. Entonces oí una voz que salía de las cuatro esquinas del altar de oro que está delante de Dios. (Apocalipsis 9, 13)

  • Decía la voz al ángel de la sexta trompeta: «Suelta a los cuatro ángeles inmovilizados a orillas del gran río Eufrates.» (Apocalipsis 9, 14)

  • Vi después a otro ángel formidable que bajaba del cielo envuelto en una nube; el arco iris rodeaba su cabeza, su cara era como el sol y sus piernas como columnas de fuego. (Apocalipsis 10, 1)

  • Entonces el ángel que había visto de pie sobre el mar y la tierra levantó su mano derecha al cielo (Apocalipsis 10, 5)

  • apenas se oiga el sonido de la trompeta del séptimo ángel, se habrá cumplido el plan misterioso de Dios, tal como lo había hecho esperar por medio de sus siervos los profetas.» (Apocalipsis 10, 7)

  • La voz que me había hablado desde el cielo se dirigió de nuevo a mí y me dijo: «Acércate al ángel que está de pie sobre el mar y la tierra, y toma el librito que tiene abierto en la mano.» (Apocalipsis 10, 8)

  • Me acerqué al ángel y le dije que me diera el librito. Me respondió: «Toma, cómelo; en tu boca será dulce como la miel, pero te producirá acidez en el estómago.» (Apocalipsis 10, 9)

  • Tomé el librito de la mano del ángel y me lo comí; en la boca era dulce como la miel, pero cuando terminé de comerlo se me volvió amargo en el estómago. (Apocalipsis 10, 10)

  • Tocó el séptimo ángel su trompeta; entonces resonaron grandes voces en el cielo: «Ahora el mundo ha pasado a ser reino de nuestro Dios y de su Cristo. Sí, reinará por los siglos de los siglos.» (Apocalipsis 11, 15)

  • Luego vi a otro ángel que volaba por lo alto del cielo, trayendo la buena nueva definitiva, la que tenía que anunciar a los habitantes de la tierra, a toda nación, raza, lengua y pueblo. (Apocalipsis 14, 6)


“Resigna-te a ser neste momento uma pequena abelha. E enquanto esperas ser uma grande abelha, ágil, hábil, capaz de fabricar bom mel, humilha-te com muito amor perante Deus e os homens, pois Deus fala aos que se mantêm diante dele humildemente”. São Padre Pio de Pietrelcina