Encontrados 139 resultados para: �Queda

  • Moab ha sido destruido y queda sin habitantes, porque se alzó contra Yavé. (Jeremías 48, 42)

  • Mientras mataban de esa manera, me postré con el rostro en tierra, gritando y diciéndole. "¡Ay, Yavé, ¿vas a esparcir tu furor por Jerusalén y destruir lo que queda de Israel?" Me respondió: "El pecado de la casa de Israel y de Judá es tan grande que supera toda medida; el país está repleto de sangre y la ciudad, llena de injusticia. Dicen para sí: Yavé ya no se preocupa del país, Yavé ya no ve nada. (Ezequiel 9, 8)

  • Mientras estaba profetizando, murió Peltías, hijo de Banaías: caí entonces con el rostro en tierra y me puse a gritar con fuerte voz: "¡Ay, Yavé! ¿Quieres destruir todo lo que queda de Israel?" (Ezequiel 11, 13)

  • Pues bien, esto dice Yavé: Me preparo para levantar mi mano en contra de los filisteos. Eliminaré a los quereteos y destruiré lo que queda de los habitantes de la costa. (Ezequiel 25, 16)

  • Les dirás a los hijos de tu pueblo: La justicia del justo no lo salvará si después se pone a pecar, y la maldad del malo no lo hará caer después que se haya apartado de su maldad; por la misma razón que el justo, vivirá. 13. Aunque yo le haya dicho al justo: ¡Vivirás!, si se queda en sus méritos y se dedica a cometer injusticias, quedará en el olvido su justicia y morirá debido a la injusticia que haya cometido. (Ezequiel 33, 12)

  • El príncipe recibirá lo que queda al este y al oeste, tanto de la parte consagrada como de la propiedad de la ciudad, en esa franja de veinticinco mil codos de largo que va desde la frontera este a la frontera oeste; la porción del príncipe será paralela a los demás lotes, y en el medio estará el dominio sagrado con el santuario de la Casa. (Ezequiel 48, 21)

  • ¿Cómo podría hablar con mi señor cuando me faltan las fuerzas y no me queda ni aliento? (Daniel 10, 17)

  • El fuego devora delante de él, detrás de él la llama abrasa. Delante de él, un jardín de delicias; detrás de él queda un desierto. No hay nada que se pueda salvar. (Joel 2, 3)

  • Así como nadie queda impertérrito al oír el rugido del león, así tampoco se negará nadie a profetizar cuando escucha lo que le habla el Señor. (Amós 3, 8)

  • Y si solamente queda una casa, con diez hombres adentro, también ellos morirán. (Amós 6, 9)

  • y cuando se presenten los deudos para sacar sus huesos, si a uno, que está al fondo le preguntan: Oye, ¿queda alguien por allá?, (Amós 6, 10)

  • éste dirá: No hay nada; y el que le preguntó le dirá: Cállate, pues no queda nadie para invocar el Nombre del Señor. (Amós 6, 11)


“Uma Missa bem assistida em vida será mais útil à sua salvação do que tantas outras que mandarem celebrar por você após sua morte!” São Padre Pio de Pietrelcina