15. Yavé, Dios de Israel, tú eres justo; mira que somos un resto de sobrevivientes. Estamos aquí en tu presencia llevando nuestros pecados, pero no podemos permanecer así en tu presencia.





“Não nos preocupemos quando Deus põe à prova a nossa fidelidade. Confiemo-nos à Sua vontade; é o que podemos fazer. Deus nos libertará, consolará e enorajará.” São Padre Pio de Pietrelcina