II Macabeos, 15
3. Pero el malvado preguntó si, en efecto, había en el cielo un poderoso que hubiera ordenado santificar el día del sábado.
3. Pero el malvado preguntó si, en efecto, había en el cielo un poderoso que hubiera ordenado santificar el día del sábado.
“Esforce-se, mesmo se for um pouco, mas sempre…” São Padre Pio de Pietrelcina