1. «Supongamos que despide un marido a su mujer; ella se va de su lado y es de otro hombre: ¿podrá volver a él? ¿no sería como una tierra manchada?» Pues bien, tú has fornicado con muchos compañeros, ¡y vas a volver a mí! - oráculo de Yahveh -.





“A divina bondade não só não rejeita as almas arrependidas, como também vai em busca das almas teimosas”. São Padre Pio de Pietrelcina