6. Sacó del Templo del Señor el poste sagrado, y lo llevó fuera de Jerusalén, al torrente Cedrón; allí lo quemó hasta reducirlo a polvo, y arrojó el polvo a la fosa común.





“O demônio é forte com quem o teme, mas é fraco com quem o despreza.” São Padre Pio de Pietrelcina