Eclesiástico, 6
2. No te dejes arrastrar por el capricho de tu pasión, para no ser despedazado como un toro:
2. No te dejes arrastrar por el capricho de tu pasión, para no ser despedazado como un toro:
“Não se desencoraje, pois, se na alma existe o contínuo esforço de melhorar, no final o Senhor a premia fazendo nela florir, de repente, todas as virtudes como num jardim florido.” São Padre Pio de Pietrelcina