12. No lo pongas junto a ti, no sea que te derribe para ocupar tu puesto; no lo hagas sentar a tu derecha, no sea que pretenda tu mismo sitial, y al fin comprendas mis palabras y sientas pesar al recordarlas.





“O mais belo Credo é o que se pronuncia no escuro, no sacrifício, com esforço”. São Padre Pio de Pietrelcina