Eclesiastés, 9
14. Había una pequeña ciudad, con pocos habitantes; un gran rey la atacó, la cercó, y construyó contra ella grandes empalizadas.
14. Había una pequeña ciudad, con pocos habitantes; un gran rey la atacó, la cercó, y construyó contra ella grandes empalizadas.
“Não se desencoraje se você precisa trabalhar muito para colher pouco. Se você pensasse em quanto uma só alma custou a Jesus, você nunca reclamaria!” São Padre Pio de Pietrelcina