Znaleziono 697 Wyniki dla: sino

  • Lo de menos fue haber seguido los pecados de Jeroboam, hijo de Nebat, sino que, además, tomó por mujer a Jezabel, hija de Ittobaal, rey de los sidonios, y se fue a servir a Baal postrándose ante él. (I Reyes 16, 31)

  • El respondió: «No soy yo el azote de Israel, sino tú y la casa de tu padre, por haber abandonado a Yahveh y haber seguido a los Baales. (I Reyes 18, 18)

  • Dijo el rey de Israel a Josafat: «Queda todavía un hombre por quien podríamos consultar a Yahveh, pero yo le aborrezco, porque no me profetiza el bien, sino el mal. Es Miqueas, hijo de Yimlá.» Dijo Josafat: «No hable el rey así.» (I Reyes 22, 8)

  • El rey de Israel dijo a Josafat: «¿No te dije que nunca me anuncia el bien sino el mal?» (I Reyes 22, 18)

  • Ahora bien, el rey de Aram había ordenado a los jefes de los carros: «No ataquéis ni a chicos ni a grandes, sino tan sólo al rey de Israel.» (I Reyes 22, 31)

  • Dijo Naamán: «Ya que no, que se dé a tu siervo, de esta tierra, la carga de dos mulos, porque tu siervo ya no ofrecerá holocausto ni sacrificio a otros dioses sino a Yahveh. (II Reyes 5, 17)

  • Uno de los oficiales dijo: «No, rey mi señor, sino que Eliseo, el profeta que hay en Israel, ha avisado al rey de Israel de las palabras que has dicho en el interior de tu dormitorio.» (II Reyes 6, 12)

  • Jehú vino con Yonadab, hijo de Rekab, al templo de Baal y dijo a los fieles de Baal: «Investigad y ved no haya aquí entre vosotros algún siervo de Yahveh, sino tan sólo siervos de Baal.» (II Reyes 10, 23)

  • Llamó entonces el rey Joás al sacerdote Yehoyadá y a los sacerdotes y les dijo: «¿Por qué no hacéis las reparaciones de la Casa? Así que no recibiréis el dinero de vuestras amistades, sino que lo daréis para la reparación de la Casa.» (II Reyes 12, 8)

  • sino que se daba a los que hacían el trabajo de las reparaciones de la Casa de Yahveh. (II Reyes 12, 15)

  • Pero no se apartaron de los pecados con que Jeroboam había hecho pecar a Israel, sino que anduvieron por ellos y el cipo siguió en pie en Samaría. (II Reyes 13, 6)

  • Pero no le quedaron a Joacaz como tropas sino cincuenta jinetes, diez carros y 10.000 infantes, pues el rey de Aram los había exterminado y reducido a polvo de la tierra. (II Reyes 13, 7)


“Sigamos o caminho que nos conduz a Deus.” São Padre Pio de Pietrelcina