Znaleziono 407 Wyniki dla: sangre

  • El hombre o la mujer en que haya espíritu de nigromante o adivino, morirá sin remedio: los lapidarán. Caerá su sangre sobre ellos. (Levítico 20, 27)

  • Pero al primogénito de vaca, o de oveja, o de cabra, no lo rescatarás: es sagrado. Derramarás su sangre sobre el altar y su grasa la harás arder como manjar abrasado de calmante aroma para Yahveh. (Números 18, 17)

  • Entonces el sacerdote Eleazar untará su dedo en la sangre de la vaca y hará con la sangre siete aspersiones hacia la entrada de la Tienda del Encuentro. (Números 19, 4)

  • Será quemada la vaca en su presencia, con su piel, su carne, su sangre e incluso sus excrementos. (Números 19, 5)

  • he aquí que un pueblo se levanta como leona, se yergue como león: no se acostará hasta devorar la presa y beber la sangre de sus víctimas.» (Números 23, 24)

  • El mismo vengador de la sangre dará muerte al homicida: en cuanto le encuentre, lo matará. (Números 35, 19)

  • o si por enemistad le ha golpeado con las manos, y muere, el que le ha herido tiene que morir: es un homicida. El vengador de la sangre dará muerte al homicida en cuanto le encuentre. (Números 35, 21)

  • la comunidad juzgará entre el homicida y el vengador de la sangre según estas normas, (Números 35, 24)

  • y salvará la comunidad al homicida de la mano del vengador de la sangre. Le hará volver la comunidad a la ciudad de asilo en la que se refugió y en ella vivirá hasta que muera el Sumo Sacerdote ungido con el óleo santo. (Números 35, 25)

  • y le encuentra el vengador de la sangre fuera del término de su ciudad de asilo, el vengador de la sangre podrá matar al homicida, sin ser responsable de su sangre, (Números 35, 27)

  • No profanaréis la tierra en que estáis, porque aquella sangre profana la tierra, y la tierra no queda expiada de la sangre derramada más que con la sangre del que la derramó. (Números 35, 33)

  • Sólo la sangre no la comeréis; la derramarás en tierra como agua. (Deuteronomio 12, 16)


“Ele e ouvir a Sua voz por meio das Suas inspirações e iluminações interiores.” São Padre Pio de Pietrelcina