Znaleziono 2230 Wyniki dla: todo es vanidad

  • Pero Jacob respondió: "Mi señor sabe que los niños son delicados. Además, las ovejas y las vacas han tenido cría, y yo debo velar por ellas. Bastará con exigirles un solo día de marcha forzada, para que muera todo el rebaño. (Génesis 33, 13)

  • Se apoderaron de sus ovejas, de sus vacas, de sus asnos, y de todo lo que había dentro y fuera de la ciudad, (Génesis 34, 28)

  • y de todos sus bienes. Se llevaron cautivos a todos los niños y a las mujeres, y saquearon todo lo que había en las casas. (Génesis 34, 29)

  • Sus hijos y sus hijas venían a consolarlo, pero él rehusaba todo consuelo, diciendo: "No. Voy a bajar enlutado a donde está mi hijo, a la morada de los muertos". Y continuaba lamentándose. (Génesis 37, 35)

  • Judá replicó: "Que se quede con todo, porque de lo contrario nos pondremos en ridículo. Yo cumplí mandándole el cabrito, y tú no la encontraste". (Génesis 38, 23)

  • Por eso dejó a cargo de José todo lo que poseía, y ya no se preocupó más de nada, fuera del alimento que comía. Como José era apuesto y de buena presencia, (Génesis 39, 6)

  • Pero él se negó y respondió a la mujer: "Teniéndome a mí, mi patrón ya no piensa en los asuntos de su casa, porque me ha confiado todo lo que posee. (Génesis 39, 8)

  • Pero un día, José entró en la casa para cumplir con sus obligaciones, en el preciso momento en que todo el personal de servicio se encontraba ausente. (Génesis 39, 11)

  • Este confió a José todos los presos que había en la cárcel, y él dirigía todo lo que allí se hacía. (Génesis 39, 22)

  • El jefe de los carceleros no vigilaba absolutamente nada de lo que había confiado a José, porque el Señor estaba con él y hacía prosperar todo lo que él realizaba. (Génesis 39, 23)

  • Y todo sucedió como él lo había interpretado: yo fui restituido a mi cargo, mientras que el otro fue ahorcado". (Génesis 41, 13)

  • Detrás de ellas subieron otras siete vacas, escuálidas, de aspecto horrible y esqueléticas, como nunca había visto en todo el territorio de Egipto. (Génesis 41, 19)


“Se precisamos ter paciência para suportar os defeitos dos outros, quanto mais ainda precisamos para tolerar nossos próprios defeitos!” São Padre Pio de Pietrelcina