Znaleziono 421 Wyniki dla: poder divino

  • En cambio, a ustedes, los que sufren, les dará el descanso junto con nosotros, cuando se manifieste el Señor Jesús, que vendrá desde el cielo, con los ángeles de su poder, (II Tesalonicenses 1, 7)

  • Estos sufrirán como castigo la perdición eterna, alejados de la presencia del Señor y de la gloria de su poder, (II Tesalonicenses 1, 9)

  • Pensando en esto, rogamos constantemente por ustedes a fin de que Dios los haga dignos de su llamado, y lleve a término en ustedes, con su poder, todo buen propósito y toda acción inspirada en la fe. (II Tesalonicenses 1, 11)

  • La venida del Impío será provocada por la acción de Satanás y estará acompañada de toda clase de demostraciones de poder, de signos y falsos milagros, (II Tesalonicenses 2, 9)

  • Por eso, Dios les envía un poder engañoso que les hace creer en la mentira, (II Tesalonicenses 2, 11)

  • el único que posee la inmortalidad y habita en una luz inaccesible, a quien ningún hombre vio ni puede ver. ¡A él sea el honor y el poder para siempre! Amén. (I Timoteo 6, 16)

  • El que está bajo las armas no se mezcla en los asuntos de la vida civil, para poder cumplir las órdenes de aquel que lo enroló. (II Timoteo 2, 4)

  • se constituye, no según la disposición de una ley meramente humana, sino según el poder de una vida indestructible. (Hebreos 7, 16)

  • También la estéril Sara, por la fe, recibió el poder de concebir, a pesar de su edad avanzada, porque juzgó digno de fe al que se lo prometía. (Hebreos 11, 11)

  • Y lo ofreció, porque pensaba que Dios tenía poder, aun para resucitar a los muertos. Por eso recuperó a su hijo, y esto fue como un símbolo. (Hebreos 11, 19)

  • Y no hay más que un solo legislador y juez, aquel que tiene el poder de salvar o de condenar. ¿Quién eres tú para condenar al prójimo? (Santiago 4, 12)

  • Porque gracias a la fe, el poder de Dios los conserva para la salvación dispuesta a ser revelada en el momento final. (I Pedro 1, 5)


“A maior caridade é aquela que arranca as pessoas vencidas pelo demônio, a fim de ganhá-las para Cristo. E isso eu faço assiduamente, noite e dia.” São Padre Pio de Pietrelcina