Znaleziono 345 Wyniki dla: fuerza interior

  • El patio grande tenía a su alrededor tres hileras de piedras talladas y una hilera de tablas de cedro, iguales a las del atrio interior de la Casa del Señor y a las del vestíbulo de la Casa. (I Reyes 7, 12)

  • El Mar estaba asentado sobre doce toros, tres vueltos hacia el norte, tres hacia el oeste, tres hacia el sur y tres hacia el este. El Mar se elevaba por encima de ellos, que estaban con sus partes traseras vueltas hacia el interior. (I Reyes 7, 25)

  • las navetas, los cuchillos, los aspersorios, las tazas y los incensarios de oro fino; los goznes de oro para las puertas del recinto interior -el Santo de los santos- y para las puertas de la nave central. (I Reyes 7, 50)

  • Los porteros lanzaron gritos hacia el interior de la ciudad, y se hizo llegar la noticia a la casa del rey. (II Reyes 7, 11)

  • Por deferencia al rey de Asiria, suprimió en la Casa del Señor el pórtico del Sábado, que se había construido en el interior, y la entrada exterior reservada al rey. (II Reyes 16, 18)

  • "Así habla Ezequías: Hoy es un día de angustia, de castigo y de oprobio, porque los hijos están a punto de nacer, pero no hay fuerza para darlos a luz. (II Reyes 19, 3)

  • Tuya, Señor, es la grandeza, la fuerza, la gloria, el esplendor y la majestad; porque a ti pertenece todo lo que hay en el cielo y en la tierra. Tuyo, Señor, es el reino; tú te elevas por encima de todo. (I Crónicas 29, 11)

  • De ti proceden la riqueza y la gloria; tú lo gobiernas todo, en tu mano están el poder y la fuerza, y es tu mano la que engrandece y afianza todas las cosas. (I Crónicas 29, 12)

  • Hizo dos querubines, obra de escultores, en el interior del Santo de los santos, y se los revistió de oro. (II Crónicas 3, 10)

  • Así, las alas desplegadas de los dos querubines medían diez metros. Ellos estaban erguidos sobre sus pies, con el rostro vuelto hacia el interior. (II Crónicas 3, 13)

  • El Mar estaba asentado sobre doce toros, tres vueltos hacia el norte, tres hacia el oeste, tres hacia el sur y tres hacia el este. El Mar se elevaba por encima de ellos, que estaban con sus partes traseras vueltas hacia el interior. (II Crónicas 4, 4)

  • y dijo: "Señor, Dios de nuestros padres, ¿acaso no eres tú el Dios del cielo y el que dominas a todos los reinos de las naciones? ¿No están en tu mano la fuerza y el poder, sin que nadie pueda resistirte? (II Crónicas 20, 6)


“O Anjo de Deus não nos abandona jamais.” São Padre Pio de Pietrelcina