Znaleziono 149 Wyniki dla: daré
yo les daré en mi Casa y dentro de mis muros un monumento y un nombre más valioso que los hijos y las hijas: les daré un nombre perpetuo, que no se borrará. (Isaías 56, 5)
Haré llegar oro en lugar de bronce y plata en lugar de hierro; bronce en lugar de madera y hierro en lugar de piedra. Por magistrados te daré la Paz y por gobernantes, la Justicia. (Isaías 60, 17)
El Señor lo juró por su mano derecha y por su brazo poderoso: "Nunca más daré tu trigo como alimento a tus enemigos, ni los extranjeros beberán el vino nuevo por el que tú has trabajado. (Isaías 62, 8)
Pero todo eso está escrito ante mí, y no me quedaré callado, sino que les daré su merecido y se lo pondré en su propio pecho, (Isaías 65, 6)
Yo les daré una señal, y a algunos de sus sobrevivientes los enviaré a las naciones: a Tarsis, Put, Lud, Mésec, Ros, Tubal y Javán, a las costas lejanas que no han oído hablar de mí ni han visto mi gloria. Y ellos anunciarán mi gloria a las naciones. (Isaías 66, 19)
Después les daré pastores según mi corazón, que los apacentarán con ciencia y prudencia. (Jeremías 3, 15)
Por eso, así habla el Señor de los ejércitos, el Dios de Israel: Yo les haré comer ajenjo y les daré de beber agua envenenada. (Jeremías 9, 14)
Entonces dije: "¡Ah, Señor! Mira que los profetas les dicen: Ustedes no verán la espada ni pasarán hambre, porque yo les daré una paz duradera en este lugar". (Jeremías 14, 13)
Por eso, así habla el Señor de los ejércitos contra los profetas: Yo les haré comer ajenjo y les daré de beber agua envenenada, porque de los profetas de Jerusalén ha salido la impiedad a todo el país. (Jeremías 23, 15)
Les daré un corazón para que me conozcan a mí, que soy el Señor; ellos serán mi Pueblo y yo seré su Dios, porque volverán a mí de todo corazón. (Jeremías 24, 7)
Les daré un corazón íntegro y una conducta íntegra, a fin de que me teman constantemente, para su propia felicidad y la de sus hijos después de ellos. (Jeremías 32, 39)
Yo daré una orden -oráculo del Señor- y los haré volver hacia esta ciudad: combatirán contra ella, la tomarán y la incendiarán. Y a las ciudades de Judá las convertiré en un país desolado y sin habitantes. (Jeremías 34, 22)