Znaleziono 1393 Wyniki dla: Tus
La joven a la que yo diga: ‘Por favor, inclina tu cántaro para que pueda beber’, y que me responda: ‘Toma, y también daré de beber a tus camellos’, esa será la mujer que has destinado para tu servidor Isaac. Así reconoceré que has sido bondadoso con mi patrón". (Génesis 24, 14)
Después que lo dejó beber hasta saciarse, añadió: "También sacaré agua hasta que tus camellos se sacien de beber". (Génesis 24, 19)
Y si ella me responde: Bebe, y también sacaré agua para que beban tus camellos, esa será la mujer que tú has destinado para el hijo de mi señor’. (Génesis 24, 44)
Ella se apresuró a bajar el cántaro de su hombro y respondió: ‘Bebe, y también daré de beber a tus camellos’. Yo bebí, y ella dio agua a los camellos. (Génesis 24, 46)
y la bendijeron, diciendo: "Hermana nuestra, que nazcan de ti millares y decenas de millares; y que tus descendientes conquisten las ciudades de sus enemigos". (Génesis 24, 60)
Iocsán fue padre de Sebá y Dedán. Los descendientes de Dedán fueron los asuritas, los letusíes y los leumíes. (Génesis 25, 3)
y él le respondió: "En tu seno hay dos naciones, dos pueblos se separan desde tus entrañas: uno será mas fuerte que el otro, y el mayor servirá al menor". (Génesis 25, 23)
Por eso, toma tus armas -tu aljaba y tu arco- ve al campo, y cázame algún animal silvestre. (Génesis 27, 3)
Que los pueblos te sirvan y las naciones te rindan homenaje. Tú serás el señor de tus hermanos, y los hijos de tu madre se inclinarán ante ti. Maldito sea el que te maldiga, y bendito el que te bendiga". (Génesis 27, 29)
Entonces el Señor le dijo: "Vuelve a la tierra de tus padres y de tu familia, y yo estaré contigo". (Génesis 31, 3)
"Yo estaba atemorizado, respondió Jacob a Labán, pensando que podías quitarme a tus hijas. (Génesis 31, 31)
Y en lo que respecta a tus dioses, si llegas a encontrarlos en poder de alguno de nosotros, ese no quedará con vida. Revisa bien, en presencia de nuestros hermanos, a ver si hay aquí algo que te pertenece, y llévatelo". Por supuesto, Jacob ignoraba que Raquel los había robado. (Génesis 31, 32)