Znaleziono 611 Wyniki dla: mano
y yo les doy vida eterna. Nunca perecerán y nadie las arrebatará jamás de mi mano. (Evangelio según San Juan 10, 28)
Aquello que el Padre me ha dado es más fuerte que todo, y nadie puede arrebatarlo de la mano de mi Padre. (Evangelio según San Juan 10, 29)
Los otros discípulos le dijeron: «Hemos visto al Señor.» Pero él contestó: «Hasta que no vea la marca de los clavos en sus manos, no meta mis dedos en el agujero de los clavos y no introduzca mi mano en la herida de su costado, no creeré.» (Evangelio según San Juan 20, 25)
Después dijo a Tomás: «Pon aquí tu dedo y mira mis manos; extiende tu mano y métela en mi costado. Deja de negar y cree.» (Evangelio según San Juan 20, 27)
Y tomándolo de la mano derecha, lo levantó. (Hecho de los Apóstoles 3, 7)
y Saulo, al levantarse del suelo, no veía nada por más que abría los ojos. Lo tomaron de la mano y lo llevaron a Damasco. (Hecho de los Apóstoles 9, 8)
Ella abrió los ojos, reconoció a Pedro y se sentó. El le dio la mano y la ayudó a levantarse; luego llamó a los santos y a las viudas y se la presentó viva. (Hecho de los Apóstoles 9, 41)
La mano del Señor estaba con ellos y fueron numerosos los que creyeron y se convirtieron al Señor. (Hecho de los Apóstoles 11, 21)
Les hizo señas con la mano pidiendo silencio, y les contó cómo el Señor lo había sacado de la cárcel. En seguida les dijo: «Comuniquen esto a Santiago y a los hermanos.» Luego salió y se fue a otro lugar. (Hecho de los Apóstoles 12, 17)
Pues ahora la mano del Señor va a caer sobre ti, quedarás ciego y no verás la luz del sol por cierto tiempo.» Al instante quedó envuelto en oscuridad y tinieblas, y daba vueltas buscando a alguien que lo llevase de la mano. (Hecho de los Apóstoles 13, 11)
Pablo, pues, se levantó, hizo señal con la mano pidiendo silencio y dijo: «Hijos de Israel y todos ustedes que temen a Dios, escuchen: (Hecho de los Apóstoles 13, 16)
En cierto momento algunos hicieron salir de entre la gente a un tal Alejandro, a quien los judíos empujaban adelante. Quería justificarlos ante el pueblo y pidió silencio con la mano. (Hecho de los Apóstoles 19, 33)