Znaleziono 359 Wyniki dla: hija de Absalón

  • No; sólo Amnón ha muerto, pues Absalón había decidido eliminarlo desde el día en que Amnón violó a su hermana Tamar. Quítese, pues, oh señor, esa idea de la cabeza de que han muerto todos sus hijos. (2 Samuel 13, 33)

  • El único que murió fue Amnón, y Absalón huyó.»Un joven que estaba de vigía divisó a un gran grupo de gente que descendía por el camino de Bajurim. Fue inmediatamente a comunicárselo al rey. (2 Samuel 13, 34)

  • Absalón, por su parte, había ido a refugiarse en casa de Talmay, hijo de Amijur, rey de Guesur, donde permaneció tres años. (2 Samuel 13, 37)

  • Después desapareció su rencor contra Absalón, pues se había consolado de la muerte de Amnón. (2 Samuel 13, 39)

  • Joab, hijo de Sarvia, se dio cuenta de que David estaba preocupado por Absalón. (2 Samuel 14, 1)

  • El rey mandó llamar a Joab y le dijo: «Bien, de acuerdo, haz lo necesario para que vuelva el joven Absalón.» (2 Samuel 14, 21)

  • Joab se encaminó hacia Guesur e hizo venir a Absalón a Jerusalén. (2 Samuel 14, 23)

  • Pero el rey dijo: «Que se retire a su casa; yo no lo quiero ver.» Absalón se retiró a su casa y no pudo ver al rey. (2 Samuel 14, 24)

  • En todo Israel no había un hombre tan admirado por su belleza como Absalón. No tenía ni un defecto desde la planta de los pies hasta la cabeza. (2 Samuel 14, 25)

  • Tuvo tres hijos y una hija que se llamaba Tamar y era muy bella. (2 Samuel 14, 27)

  • Absalón permaneció dos años en Jerusalén sin ver al rey. (2 Samuel 14, 28)

  • Entonces Absalón dijo a sus servidores: «Ustedes conocen el campo de Joab sembrado de cebada, que está junto al mío. Pues bien, vayan allá y préndanle fuego.» Los servidores de Joab, por su parte, vinieron con sus ropas desgarradas a decirle a su amo que los trabajadores de Absalón habían incendiado su campo. (2 Samuel 14, 30)


“Não queremos aceitar o fato de que o sofrimento é necessário para nossa alma e de que a cruz deve ser o nosso pão cotidiano. Assim como o corpo precisa ser nutrido, também a alma precisa da cruz, dia a dia, para purificá-la e desapegá-la das coisas terrenas. Não queremos entender que Deus não quer e não pode salvar-nos nem santificar-nos sem a cruz. Quanto mais Ele chama uma alma a Si, mais a santifica por meio da cruz.” São Padre Pio de Pietrelcina