Znaleziono 14 Wyniki dla: Helquías
«Sube donde el sumo sacerdote Helquías, y dile que funda el dinero que la gente ofrece para la Casa de Yavé y que recogen los guardias de las puertas, (2 Reyes 22, 4)
Al recibirlo, el sumo sacerdote Helquías dijo al secretario Safán: «He hallado el libro de la Ley en la Casa de Yavé.» Helquías entregó el libro a Safán, que lo leyó. (2 Reyes 22, 8)
Después, Safán anunció al rey: «El sacerdote Helquías me ha entregado un libro.» Y Safán leyó el libro para que lo conociera el rey. (2 Reyes 22, 10)
y ordenó a Helquías, a Ajicam, a Acbor, al secretario Safán y a Asías, su ministro, lo siguiente: (2 Reyes 22, 12)
El sacerdote Helquías, Ajicam, Acbor, Safán y Asías, fueron a consultar a la profetisa Joldá, esposa de Salum, hijo de Ticva, hijo de Jarjas, encargado del vestuario. Ella vivía en Jerusalén en la ciudad nueva. (2 Reyes 22, 14)
Entonces el rey ordenó al sumo sacerdote Helquías, así como a los sacerdotes de menor grado y a todos los porteros, que sacaran todos los objetos que se habían hecho para Baal, para Asera y para todos los astros del cielo. Los hizo quemar fuera de Jerusalén, en las tierras baldías del Cedrón, y arrojó sus cenizas a la sepultura común del pueblo. (2 Reyes 23, 4)
Josías se conformó en todo a las palabras de la Ley escritas en el libro que el sacerdote Helquías había encontrado en la Casa de Yavé. Fue así como eliminó a los espiritistas y a los adivinos, los idolitos familiares y los ídolos, y todas esas cosas asquerosas que se veían en el país de Judá y en Jerusalén. (2 Reyes 23, 24)
Fueron, pues, donde el sumo sacerdote Helquías y le entregaron el dinero traído a la Casa de Dios, es decir, todo lo que los levitas y porteros habían recibido de Manasés y de Efraím y de todo el resto de Israel, de todo Judá y Benjamín y de los habitantes de Jerusalén. (2 Crónicas 34, 9)
Cuando estaban sacando el dinero traído de la Casa de Yavé, el sacerdote Helquías encontró el libro de la Ley de Yavé dada a Moisés. (2 Crónicas 34, 14)
Tomó la palabra y dijo al secretario Safán: «He encontrado el libro de la Ley en la Casa de Yavé»; y Helquías entregó el libro a Safán. (2 Crónicas 34, 15)
Luego el secretario Safán anunció al rey: «El sacerdote Helquías me ha entregado un libro.» Y Safán leyó una parte de dicho libro en presencia del rey. (2 Crónicas 34, 18)
y ordenó a Helquías, a Ajicam, hijo de Safán, a Abdón, hijo de Miká, a Safán, secretario, y a Asaías, servidor del rey: (2 Crónicas 34, 20)