6. Por el norte, la frontera empezaba desde la Lengua del Mar, a la desembocadura del Jordán, subía a Bet-Hagla, pasaba por el norte de Bet-Arabá y subía hasta la piedra de Boén, hijo de Rubén.





“O santo silêncio nos permite ouvir mais claramente a voz de Deus”. São Padre Pio de Pietrelcina