Jeremías, 51
50. ¡Ustedes, que se libraron de la espada, partan, no se queden allí! Acuérdense de Yavé en esta tierra lejana, y que Jerusalén les venga a la memoria:
50. ¡Ustedes, que se libraron de la espada, partan, no se queden allí! Acuérdense de Yavé en esta tierra lejana, y que Jerusalén les venga a la memoria:
“A mulher forte é a que tem temor de Deus, a que mesmo à custa de sacrifício faz a vontade de Deus.” São Padre Pio de Pietrelcina