52. Jesús se dirigió después a los que habían venido a tomarlo preso, a los jefes de los sacerdotes, de la policía del Templo y de los judíos y les dijo: «Tal vez buscan a un ladrón, y por eso han venido a detenerme con espadas y palos.





“Pense na felicidade que está reservada para nós no Paraíso”. São Padre Pio de Pietrelcina