Evangelio según San Juan, 8
35. Pero el esclavo no se quedará en la casa para siempre; el hijo, en cambio, permanece para siempre.
35. Pero el esclavo no se quedará en la casa para siempre; el hijo, en cambio, permanece para siempre.
“A oração é a efusão de nosso coração no de Deus.” São Padre Pio de Pietrelcina