15. y eligió a los hombres más selectos para la guerra, como lo había ordenado su señor: unos 120.000 hombres, más 12.000 arqueros a caballo,





“Que o Espírito Santo guie a sua inteligência, faça-o descobrir a verdade escondida na Sagrada Escritura e inflame a sua vontade para praticá-la.” São Padre Pio de Pietrelcina