Ezequiel, 28

La Biblia de Jerusalén

1 La palabra de Yahveh me fue dirigida en estos términos:

2 Hijo de hombre, di al príncipe de Tiro: Así dice el Señor Yahveh: ¡Oh!, tu corazón se ha engreído y has dicho: «Soy un dios, estoy sentado en un trono divino, en el corazón de los mares.» Tú que eres un hombre y no un dios, equiparas tu corazón al corazón de Dios.

3 ¡Oh sí, eres más sabio que Danel! Ningún sabio es semejante a ti.

4 Con tu sabiduría y tu inteligencia te has hecho una fortuna, has amontonado oro y plata en tus tesoros.

5 Por tu gran sabiduría y tu comercio has multiplicado tu fortuna, y por su fortuna se ha engreído tu corazón.

6 Por eso, así dice el Señor Yahveh: Porque has equiparado tu corazón al corazón de Dios,

7 por eso, he aquí que yo traigo contra ti extranjeros, los más bárbaros entre las naciones. Desenvainarán la espada contra tu linda sabiduría, y profanarán tu esplendor;

8 te precipitarán en la fosa, y morirás de muerte violenta en el corazón de los mares.

9 ¿Podrás decir aún: «Soy un dios», ante tus verdugos? Pero serás un hombre, que no un dios, entre las manos de los que te traspasen.

10 Tendrás la muerte de los incircuncisos, a manos de extranjeros. Porque he hablado yo, oráculo del Señor Yahveh.

11 La palabra de Yahveh me fue dirigida en estos términos:

12 Hijo de hombre, entona una elegía sobre el rey de Tiro. Le dirás: Así dice el Señor Yahveh: Eras el sello de una obra maestra, lleno de sabiduría, acabado en belleza.

13 En Edén estabas, en el jardín de Dios. Toda suerte de piedras preciosas formaban tu manto: rubí, topacio, diamante, crisólito, piedra de ónice, jaspe, zafiro, malaquita, esmeralda; en oro estaban labrados los aretes y pinjantes que llevabas, aderezados desde el día de tu creación.

14 Querubín protector de alas desplegadas te había hecho yo, estabas en el monte santo de Dios, caminabas entre piedras de fuego.

15 Fuiste perfecto en su conducta desde el día de tu creación, hasta el día en que se halló en ti iniquidad.

16 Por la amplitud de tu comercio se ha llenado tu interior de violencia, y has pecado. Y yo te he degradado del monte de Dios, y te he eliminado, querubín protector, de en medio de las piedras de fuego.

17 Tu corazón se ha pagado de tu belleza, has corrompido tu sabiduría por causa de tu esplendor. Yo te he precipitado en tierra, te he expuesto como espectáculo a los reyes.

18 Por la multitud de tus culpas por la inmoralidad de tu comercio, has profanado tus santuarios. Y yo he sacado de ti mismo el fuego que te ha devorado; te he reducido a ceniza sobre la tierra, a los ojos de todos los que te miraban.

19 Todos los pueblos que te conocían están pasmados por ti. Eres un objeto de espanto, y has desaparecido para siempre.

20 La palabra de Yahveh me fue dirigida en estos términos:

21 Hijo de hombre, vuelve tu rostro hacia Sidón y profetiza contra ella.

22 Dirás: Así dice el Señor Yahveh: Aquí estoy contra ti, Sidón; en medio de ti seré glorificado. Se sabrá que yo soy Yahveh, cuando yo haga justicia de ella y manifeste en ella mi santidad.

23 Mandaré contra ella la peste, habrá sangre en sus calles; las víctimas caerán en medio de ella, bajo la espada que la cercará por todas partes, y se sabrá que yo soy Yahveh.

24 No habrá más, para la casa de Israel, espina que punce ni zarza que lacere, entre todos sus vecinos que la desprecian, y se sabrá que yo soy el Señor Yahveh.

25 Así dice el Señor Yahveh: Cuando yo reúna a la casa de Israel de en medio de los pueblos donde está dispersa, manifestaré en ellos mi santidad a los ojos de las naciones. Habitarán en la tierra que yo di a mi siervo Jacob;

26 habitarán allí con seguridad, construirán casas y plantarán viñas; vivirán seguros. Cuando yo haga justicia de todos sus vecinos que los desprecian, se sabrá que yo soy Yahveh su Dios.




Versículos relacionados com Ezequiel, 28:

Ezequiel 28 habla sobre el juicio de neumáticos, una ciudad que estaba orgullosa de su riqueza y sabiduría, pero que se había desviado de los caminos de Dios. El capítulo también describe la caída del rey de Tire, quien se consideraba un Dios y se jactaba de su grandeza. Los versos seleccionados a continuación abordan los problemas relacionados con el orgullo, el otoño y la prueba de disparos, así como la soberanía de Dios sobre todas las naciones.

Isaías 2:12: Por el día del Señor de los anfitriones vendrá contra todos los excelentes y altivos, y contra todos los que se exaltan a sí mismo, que este versículo habla sobre el juicio de Dios contra aquellos que están exaltados y orgullosos.

Proverbios 16:18: "Excelente precede a la ruina, y la altitud del espíritu precede a la caída" Este verso habla sobre la conexión entre orgullo y caída, algo que es evidente en la caída del tiro.

Jeremías 25:15-17: "Porque así me dijo el Señor, Dios de Israel: Tome esta taza de vino de la ira y dale a Beber a todas las naciones, a lo que te envío y Camino Saca. Me vuelve loco por la espada que envío entre ellos. Luego tomé la taza de la mano del Señor, y lo di para beber a todas las naciones. "Este versículo habla sobre la soberanía de Dios sobre todas las naciones y sobre el castigo que trae los que se desvían de sus caminos.

Salmo 52:7: "Aquí está el hombre que no tomó a Dios por su fortaleza; primero confió en la abundancia de sus riquezas y se fortaleció en su malicia" Este versículo habla sobre la tontería de confiar en la riqueza y la malicia en lugar de confiar en En Dios, algo que era evidente en la vida de los habitantes de los disparos.

Obadías 1:3-4: "El orgullo de tu corazón te ha engañado, tú que habita en las grietas de las rocas, cuya vivienda está en lo más alto; quién dice en tu corazón: ¿Quién me llevará al suelo? Levantas tu nido como águila, a partir de ahí te derribaré, dice el Señor: "Este versículo habla sobre la arrogancia y la caída de los que se elevan por encima de los demás, algo que también se ve en la caída de los disparos.


Capitoli: