26. Entonces todo el pueblo, desde el más pequeño hasta el más grande, y los jefes de las tropas, partieron y se fueron a Egipto, por miedo a los caldeos.





“Sejam como pequenas abelhas espirituais, que levam para sua colméia apenas mel e cera. Que, por meio de sua conversa, sua casa seja repleta de docilidade, paz, concórdia, humildade e piedade!” São Padre Pio de Pietrelcina