Daniel, 1
11. Daniel dijo al guardia a quien el jefe de los eunucos había confiado el cuidado de Daniel, Ananías, Misael y Azarías:
11. Daniel dijo al guardia a quien el jefe de los eunucos había confiado el cuidado de Daniel, Ananías, Misael y Azarías:
Daniel 1 narra la historia de cuatro jóvenes hebreos que fueron llevados cautivos a Babilonia y recibieron instrucciones de comer de la comida y el vino del rey, pero se negaron debido a sus creencias religiosas. Pidieron comer solo verduras y agua, y Dios los bendijo, haciéndolos más saludables y fuertes que otros cautivos. Los siguientes son cinco versículos relacionados con los temas de este capítulo:
1 Corintios 10:31: "Por lo tanto, ya sea que comas o hagas cualquier otra cosa, haz todo a la gloria de Dios". Este versículo habla sobre la importancia de vivir una vida que honra a Dios en todas las áreas, incluido lo que comemos.
Proverbios 23:6-8: "No comas la comida aguda, ni quieras tus manjares, porque es como alguien que piensa a ti mismo: 'Come y bebe', pero no eres corazón contigo. Vomitarás el manjar que comió y perderá sus hermosas palabras ". Este verso advierte contra la codicia y el amor excesivo por la comida, lo que demuestra que las personas egoístas no están preocupadas por el bienestar de los demás.
Hechos 10:13-15: "Entonces una voz le dijo: '¡Levántate, Peter, mata y come!' Pero Peter respondió: "¡No es una manera, señor! Nunca he comido nada impuro o sucio". Y la voz le habló por segunda vez: "No sea impurario lo que Dios ha purificado". "Este verso habla sobre la pureza de la comida, una preocupación importante para los hebreos en la época de Daniel.
Romanos 14:17: "Porque el reino de Dios no es comida ni bebida, sino justicia, paz y alegría en el Espíritu Santo". Este versículo enfatiza la importancia de cosas más importantes que la comida, como la justicia y la paz que provienen de Dios.
Marcos 7:18-20: "Él (Jesús) les dijo:" Entonces, ¿eres así también? Alimentos 'puros'. Este versículo muestra cómo Jesús explicó que la pureza no está relacionada con la comida, sino con nuestra naturaleza interior y lo que sale de ella.
“Deus ama quem segue o caminho da virtude.” São Padre Pio de Pietrelcina