Fondare 329 Risultati per: enemigos

  • David dijo a Yahveh las palabras de este cántico el día que le salvó Yahveh de la mano de todos sus enemigos y de la mano de Saúl. (II Samuel 22, 1)

  • Invoco a Yahveh que es digno de alabanza, y quedo a salvo de mis enemigos. (II Samuel 22, 4)

  • Persigo a mis enemigos, los deshago, no vuelvo hasta haberlos acabado. (II Samuel 22, 38)

  • a mis enemigos haces dar la espada, extermino a los que me odian. (II Samuel 22, 41)

  • Tú me libras de mis enemigos, me exaltas sobre mis agresores, y del hombre violento me salvas. (II Samuel 22, 49)

  • Llegó Gad donde David y le anunció: «¿Qué quieres que te venga, tres años de gran hambre en tu país, tres meses de derrotas ante tus enemigos y que te persigan, o tres días de peste en tu tierra? Ahora piensa y mira qué debo responder al que me envía.» (II Samuel 24, 13)

  • y le dijo Dios: «Porque has pedido esto y, en vez de pedir para ti larga vida, riquezas, o la muerte de tus enemigos, has pedido discernimiento para saber juzgar, (I Reyes 3, 11)

  • «Sabes bien que mi padre David no pudo edificar una Casa al Nombre de Yahveh su Dios a causa de las guerras en que sus enemigos le envolvieron hasta que Yahveh los puso bajo la planta de sus pies. (I Reyes 5, 17)

  • si se vuelven a ti con todo su corazón y con toda su alma en el país de los enemigos que los deportaron, y te suplican vueltos hacia la tierra que tú diste a sus padres y hacia la ciudad que has elegido y hacia la Casa que he edificado a tu Nombre, (I Reyes 8, 48)

  • sino que reverenciaréis sólo a Yahveh vuestro Dios, y él os librará de la mano de todos vuestros enemigos.» (II Reyes 17, 39)

  • Arrojaré el resto de mi heredad y los entregaré en manos de sus enemigos; serán presa y botín de todos sus enemigos, (II Reyes 21, 14)

  • Presentóse David delante de ellos y les dijo: «Si venís a mí en son de paz para ayudarme, mi corazón irá a una con vosotros; pero si es para engañanarme en favor de mis enemigos, sin que hubiere violencia en mis manos, ¡véalo el Dios de nuestros padres y lo castigue!» (I Crónicas 12, 18)


“É necessário manter o coração aberto para o Céu e aguardar, de lá, o celeste orvalho.” São Padre Pio de Pietrelcina