Fondare 158 Risultati per: descanso en el séptimo día

  • El día séptimo, alegre por el vino el corazón del rey, mandó a Mehumán, a Bizzetá, a Jarboná, a Bigtá, a Abagtá, a Zetar y a Karkás, los siete eunucos que estaban al servicio del rey Asuero, (Ester 1, 10)

  • Ester fue presentada al rey Asuero, en el palacio real, el mes décimo, que es el mes de Tébet, en el año séptimo de su reinado, (Ester 2, 16)

  • Ofreció el rey un gran banquete a todos sus jefes y servidores, el banquete de Ester; concedió un día de descanso a todas las provincias y repartió presentes con real magnificencia. (Ester 2, 18)

  • Me hierven las entrañas sin descanso, me han alcanzado días de aflicción. (Job 30, 27)

  • Ellos se ríen de mi caída, se reúnen, sí, se reúnen contra mí; extranjeros, que yo no conozco, desgarran sin descanso; (Salmos 35, 15)

  • En Dios sólo el descanso de mi alma, de él viene mi salvación; (Salmos 62, 2)

  • En el día de mi angustia voy buscando al Señor, por la noche tiendo mi mano sin descanso, mi alma el consuelo rehúsa. (Salmos 77, 3)

  • para darle descanso en los días de desgracia, mientras se cava para el impío la fosa. (Salmos 94, 13)

  • ¡Buscad a Yahveh y su fuerza, id tras su rostro sin descanso, (Salmos 105, 4)

  • Yo observaré sin descanso tu ley para siempre jamás. (Salmos 119, 44)

  • En vano madrugáis a levantaros, el descanso retrasais, los que coméis pan de fatigas, cuando él colma a su amado mientras duerme. (Salmos 127, 2)

  • Pero no había víveres en los almacenes, porque aquel era año séptimo, y además los israelitas liberados de los gentiles y traídos a Judea habían consumido las últimas reservas. (I Macabeos 6, 53)


“A divina bondade não só não rejeita as almas arrependidas, como também vai em busca das almas teimosas”. São Padre Pio de Pietrelcina