Fondare 127 Risultati per: Detrás

  • Pero no quiso apartarse y Abner le hirió en el vientre con el cuento de la lanza, saliéndole la lanza por detrás. Cayó y allí mismo murió. Todos cuantos llegaban al lugar donde Asahel cayó y murió se detenían. (II Samuel 2, 23)

  • Su marido partió con ella; la seguía llorando detrás de ella, hasta Bajurim. Abner le dijo: «Anda vuélvete.» Y se volvió. (II Samuel 3, 16)

  • Y dijo David a Joab y a todo el ejército que le acompañaba: «Rasgad vuestros vestidos, ceñíos los sayales y llorad por Abner.» El rey David iba detrás de las andas. (II Samuel 3, 31)

  • David consultó a Yahveh, que le dijo: «No subas contra ellos. Da un rodeo detrás de ellos y atácalos frente a las balsameras. (II Samuel 5, 23)

  • Ahora pues di esto a mi siervo David: Así habla Yahveh Sebaot: Yo te he tomado del pastizal, de detrás del rebaño, para que seas caudillo de mi pueblo Israel. (II Samuel 7, 8)

  • Viendo Joab que tenía un frente de combate por delante y otro por detrás, escogió a los mejores de Israel y los puso en línea contra los arameos. (II Samuel 10, 9)

  • En la carta había escrito: «Poned a Urías frente a lo más reñido de la batalla y retiraos de detrás de él para que sea herido y muera.» (II Samuel 11, 15)

  • Y mientras estés tú allí hablando con el rey, entraré yo detrás de ti y completaré tus palabras.» (I Reyes 1, 14)

  • Subiréis luego detrás de él, y vendrá a sentarse sobre mi trono y él reinará en mi lugar, porque le pongo como caudillo de Israel y Judá.» (I Reyes 1, 35)

  • Subió después todo el pueblo detrás de él; la gente tocaba las flautas y manifestaba tan gran alegría que la tierra se hendía con sus voces. (I Reyes 1, 40)

  • colocadas sobre la prominencia que estaba detrás del trenzado; doscientas granadas alrededor del segundo capitel. (I Reyes 7, 20)

  • mientras que tú has hecho más mal que todos los que fueron antes que tú, y has ido a hacerte otros dioses, imágenes fundidas, para irritarme, y me has arrojado detrás de tus espaldas, (I Reyes 14, 9)


“Para mim, Deus está sempre fixo na minha mente e estampado no meu coração.” São Padre Pio de Pietrelcina