Fondare 528 Risultati per: Aceite Santo

  • El día octavo tomará dos corderos sin defecto y una cordera de un año sin defecto; y como oblación, tres décimas de flor de harina amasada con aceite y un cuartillo de aceite. (Levítico 14, 10)

  • El sacerdote tomará uno de los corderos para ofrecerlo como sacrificio de reparación, además del cuartillo de aceite, y lo mecerá como ofrenda ante Yahveh. (Levítico 14, 12)

  • Y, tomando del cuartillo de aceite, el sacerdote echará parte de él sobre la palma de su mano izquierda. (Levítico 14, 15)

  • Después untará un dedo de su mano derecha en el aceite que tiene en la palma de su mano izquierda, y con su dedo hará siete aspersiones de aceite delante de Yahveh. (Levítico 14, 16)

  • Con el aceite restante que tiene en su mano el sacerdote untará el lóbulo de la oreja derecha del que se purifica, el pulgar de su mano derecha y el de su pie derecho sobre la sangre de la víctima de reparación. (Levítico 14, 17)

  • El resto del aceite que quede en la mano del sacerdote, se echará sobre la cabeza del que se purifica. El sacerdote expiará así por él ante Yahveh. (Levítico 14, 18)

  • Si es pobre y no tiene suficientes recursos, tomará un cordero com sacrificio de reparación, como ofrenda mecida, para hacer expiación por él, y además, como oblación, una décima de flor de harina amasada con aceite, un cuartillo de aceite, (Levítico 14, 21)

  • El sacerdote tomará el cordero del sacrificio de reparación y el cuartillo de aceite, y los mecerá como ofrenda ante Yahveh. (Levítico 14, 24)

  • Luego derramará parte del aceite sobre la palma de su mano izquierda; (Levítico 14, 26)

  • con un dedo de su mano derecha hará ante Yahveh siete aspersiones con el aceite que tiene en la palma de la mano izquierda, (Levítico 14, 27)

  • untará con el aceite que tiene en su mano el lóbulo de la oreja derecha del que se purifica, el pulgar de su mano derecha y el de su pie derecho, en el lugar donde puso la sangre de la víctima de reparación. (Levítico 14, 28)

  • Derramará el resto del aceite que le quede en la mano sobre la cabeza del que se purifica, haciendo expiación por él ante Yahveh. (Levítico 14, 29)


“De todos os que vierem pedir meu auxílio, nunca perderei nenhum!” São Padre Pio de Pietrelcina