Fondare 276 Risultati per: todavía

  • Porque todavía faltaun poco, muy poco tiempo, y el que debe venir vendrá sin tardar. (Hebreos 10, 37)

  • Después de todo, en la lucha contra el pecado, ustedes no han resistido todavía hasta derramar su sangre. (Hebreos 12, 4)

  • Pero él nos da una gracia más grande todavía, según la palabra de la Escritura que dice: Dios resiste a los soberbios y da su gracia a los humildes. (Santiago 4, 6)

  • Porque ustedes lo aman sin haberlo visto, y creyendo en él sin verlo todavía, se alegran con un gozo indecible y lleno de gloria, (I Pedro 1, 8)

  • El que dice que está en la luz y no ama a su hermano, está todavía en las tinieblas. (I Juan 2, 9)

  • Queridos míos, desde ahora somos hijos de Dios, y lo que seremos no se ha manifestado todavía. Sabemos que cuando se manifieste, seremos semejantes a él, porque lo veremos tal cual es. (I Juan 3, 2)

  • Permanece alerta y reanima lo que todavía puedes rescatar de la muerte, porque veo que tu conducta no es perfecta delante de mi Dios. (Apocalipsis 3, 2)

  • Sin embargo, tienes todavía en Sardes algunas personas que no han manchado su ropa: ellas me acompañarán vestidas de blanco, porque lo han merecido. (Apocalipsis 3, 4)

  • Entonces se le dio a cada uno una vestidura blanca y se les dijo que esperaran todavía un poco, hasta que se completara el número de sus compañeros de servicio y de sus hermanos, que iban a sufrir la misma muerte. (Apocalipsis 6, 11)

  • La primera calamidad ha pasado, pero sepan que todavía faltan dos más. (Apocalipsis 9, 12)

  • También simbolizan a siete reyes: cinco de ellos han caído, uno vive y el otro todavía no ha llegado, pero cuando llegue, durará poco tiempo. (Apocalipsis 17, 10)

  • Los diez cuernos que has visto son diez reyesque todavía no han recibido su reino, pero que recibirán el poder real, juntamente con la Bestia, sólo por una hora. (Apocalipsis 17, 12)


“Quando ofendemos a justiça de Deus, apelamos à Sua misericórdia. Mas se ofendemos a Sua misericórdia, a quem podemos apelar? Ofender o Pai que nos ama e insultar quem nos auxilia é um pecado pelo qual seremos severamente julgados.” São Padre Pio de Pietrelcina