Fondare 61 Risultati per: temas

  • Da limosna según la medida de tus posibilidades: si tienes poco, no temas dar de lo poco que tienes. (Tobías 4, 8)

  • Tobit le respondió: "¡No pienses eso! Nuestro hijo se va muy bien y volverá junto a nosotros con toda felicidad; tus propios ojos verán el día en que regresará sano y salvo. No te preocupes ni temas por ellos, hermana. (Tobías 5, 21)

  • Cuando te presentes, no temas: comunícale todo lo que acabas de decir, y él te tratará bien". (Judit 10, 16)

  • No temas a este verdugo: muéstrate más bien digno de tus hermanos y acepta la muerte, para que yo vuelva a encontrarte con ellos en el tiempo de la misericordia". (II Macabeos 7, 29)

  • No temas a tu sentencia de muerte, recuerda a los que te precedieron y te seguirán. (Eclesiástico 41, 3)

  • Tú le dirás: Mantente alerta y no pierdas la calma; no temas, y que tu corazón no se intimide ante esos dos cabos de tizones humeantes, ante el furor de Resín de Arám y del hijo de Remalías. (Isaías 7, 4)

  • Por eso, así habla el Señor de los ejércitos: Pueblo mío, que habitas en Sión, no temas nada de Asiria, que te golpea con el bastón y alza su vara contra ti a la manera de Egipto. (Isaías 10, 24)

  • y este les dijo: "Díganle a su señor: Así habla el Señor: No temas por las palabras que has oído y con las que me ultrajaron los lacayos del rey de Asiria. (Isaías 37, 6)

  • No temas, porque yo estoy contigo, no te inquietes, porque yo soy tu Dios; yo te fortalezco y te ayudo, yo te sostengo con mi mano victoriosa. (Isaías 41, 10)

  • Porque yo, el Señor, soy tu Dios, el que te sostengo de la mano derecha y te digo: "No temas, yo vengo en tu ayuda". (Isaías 41, 13)

  • Tú eres un gusano, Jacob, eres una lombriz, Israel, pero no temas, yo vengo en tu ayuda -oráculo del Señor- y tu redentor es el Santo de Israel. (Isaías 41, 14)

  • Y ahora, así habla el Señor, el que te creó, Jacob, el que te formó, Israel: No temas, porque yo te he redimido, te he llamado por tu nombre, tú me perteneces. (Isaías 43, 1)


“Não abandone sua alma à tentação, diz o Espírito Santo, já que a alegria do coração é a vida da alma e uma fonte inexaurível de santidade.” São Padre Pio de Pietrelcina