Fondare 479 Risultati per: segundo libro de Samuel

  • Una vez que el primero murió de esta manera, llevaron al suplicio al segundo. Después de arrancarle el cuero cabelludo, le preguntaron: "¿Vas a comer carne de cerdo, antes que sean torturados todos los miembros de tu cuerpo?". (II Macabeos 7, 7)

  • También mandó a Eleazar que leyera en alta voz el Libro sagrado. Y finalmente, dándoles como santo y seña el grito "Auxilio de Dios", se lanzó él mismo a combatir contra Nicanor, al frente del primer cuerpo. (II Macabeos 8, 23)

  • en primer lugar, sinceramente preocupado por los intereses del rey y, en segundo lugar, por consideración hacia mis compatriotas. A causa de la conducta irreflexiva de los hombres ya mencionados, toda nuestra nación padece no pocos infortunios. (II Macabeos 14, 8)

  • El cuidado de las mujeres y los niños, de sus hermanos y parientes, pasaba a segundo plano; lo primero y principal era el Templo consagrado. (II Macabeos 15, 18)

  • Cuando eran exterminados los impíos, ella libró a un justo, escapado del fuego que caía sobre las Cinco Ciudades. (Sabiduría 10, 6)

  • La Sabiduría, en cambio, libró de las fatigas a sus servidores. (Sabiduría 10, 9)

  • Ella no abandonó al justo que fue vendido, sino que lo libró del pecado; (Sabiduría 10, 13)

  • Porque, primero, ha desobedecido la Ley del Señor; segundo, ha faltado contra su marido; tercero, se ha prostituido con su adulterio, teniendo hijos con un hombre extraño. (Eclesiástico 23, 23)

  • Todo esto es el libro de la Alianza del Dios Altísimo, la Ley que nos prescribió Moisés como herencia para las asambleas de Jacob. (Eclesiástico 24, 23)

  • Samuel fue amado por su Señor; como profeta del Señor, estableció la realeza y ungió jefes para que gobernaran a su pueblo. (Eclesiástico 46, 13)

  • pero invocaron al Señor misericordioso, tendiendo sus manos hacia él. El Santo los escuchó en seguida desde el cielo y los libró por medio de Isaías, (Eclesiástico 48, 20)

  • Una instrucción de sabiduría y de ciencia es la que dejó grabada en este libro Jesús, hijo de Sirá, hijo de Eleazar, de Jerusalén, que derramó como lluvia la sabiduría de su corazón. (Eclesiástico 50, 27)


“A mansidão reprime a ira.” São Padre Pio de Pietrelcina